Bach en Brasil

bachbrasilEn Los Beatles viajan al Barroco comentábamos la excelente versión que de estos clásicos del Pop realizaba Peter Breiner. En esta ocasión proponemos un nuevo viaje en el tiempo musical, esta vez hacia delante. Imaginemos cómo sonarían algunas composiciones de J.S. Bach interpretadas por un grupo de samba y choro brasileño.

Se han realizado multitud de versiones de la música de Bach, especialmente en jazz. Recordemos también la veneración que Heitor Villa-lobos sentía por el maestro cantor y que puede apreciarse de forma muy clara en sus célebres Bacchianas Brasileiras, donde combina ritmos de danzas típicos de Brasil, al igual que Bach y el resto de los barrocos utilizaban danzas de la época para confeccionar sus suites instrumentales.

El Choro – Esta forma musical única, a medio camino entre lo clásico y lo popular, supone un punto de encuentro perfecto para la compleja música clásica y la más libre e improvisada música popular. Esta última requiere virtuosismo, como la clásica, pero también otra característica propia del jazz, el swing.

Podemos encontrar los primeros grupos de choros hacia mediados del siglo XIX. Varios amigos se reunían los domingos en Río de Janeiro para tocar sus instrumentos típicos: guitarra acústica, flauta y cavaquinho, una especie de ukelele con cuatro cuerdas. La procedencia de las obras que interpretaban era principalmente de la tradición clásica, polcas, valses y chotis. Fueron compositores de la talla de Ernesto Nazareth y Chiquinha Gonzaga quienes consolidaron el estilo reconocible hoy día como choro.

El choro toma su nombre de ese tono melancólico que caracterizaba a la mayoría de las composiciones populares de principios del siglo XX, derivando de la palabra portuguesa ‘’chorar’’, llorar.

Alfredo da Rocha Viana Filho, ‘’Pixinguinha’’ (1897-1973), a quien pertenecen algunos de los arreglos contenidos en el disco que comentamos, fue quien consiguió el perfecto equilibrio entre varios elementos, en principio contradictorios. Su música es sofisticada pero también muy rítmica, concisa a la vez que expansiva. Los intérpretes deben tocar perfectamente compenetrados pero aún así posee una exquisita libertad.

El choro vio llegar su decadencia en los años sesenta del siglo XX, coincidiendo con la aparición del nuevo estilo brasileño, la Bossa Nova (Nueva Ola). Sin embargo, a mediados de los setenta experimentó de nuevo un renacer, de la mano de artistas como Henrique Cazes, director de la Camerata Brasil.

El Maestro Cantor en Brasil – La riqueza tímbrica de los instrumentos populares brasileños logra expresar a la perfección el estilo musical barroco, y especialmente el de J.S. Bach. La mandolina, la viola caipira (que sustituye de forma muy efectiva al clave) son algunos de los instrumentos utilizados por la Camerata Brasil, a los que se unen guitarras de seis y siete cuerdas, cavaquinho y ocasionalmente piano, violín, clarinete y saxofón.

En la presente grabación se combinan fragmentos completos de Bach con otros donde sólo se utiliza un breve tema que luego es tratado y variado en el estilo popular del choro. También hay composiciones originales de Pixinguinha, Ferreira (1915-1980) y Gnatalli (1906-1988)

El disco comienza con una brillante versión del primer tiempo del Concierto Italiano BWV 971, original para clave. A continuación, Radamés Gnatalli utiliza el tema del preludio de la suite para cello número 3 como motivo conductor de su Remexendo.

Tanto la invención a dos voces número 13 como el vivace del doble concierto para dos violines BWV 1041 se nos presentan completos siendo este último un claro ejemplo de los lazos indisolubles que a todos los niveles unen la música barroca con el estilo típicamente brasileño. La adaptación surge como algo natural, nunca forzado.

Otras versiones muy interesantes son la del Badinerie de la suite para flauta y orquesta BWV 1067, adaptada por Pixinguinha, y el aria de soprano de las Bacchianas Brasileiras n° 5 de Villa-lobos.

Lo importante es enriquecer el gusto musical – El tema de las adaptaciones musicales siempre ha tenido y tendrá sus detractores, especialmente en casos tan aparentemente dispares como el que nos ocupa. Personalmente no veo ningún problema en estas versiones de obras de Bach, al igual que en las anteriormente comentadas de Los Beatles. Cuando una música es buena de verdad, un verdadero ‘’clásico’’, resiste cualquier proceso transformador, del que probablemente sale fortalecida. Lo ‘’peor’’ que puede pasar es que el incondicional de Bach descubra y se aficione a la refinada música de los choros, o que el experto en música brasileña descubra la perfección de la música de Bach. En ambos casos los dos ampliarían y enriquecerían su experiencia y gusto musical, que es lo que a mi parecer importa.

Discografía recomendada:

Bach in Brazil – Camerata Brasil, Dir.: Henrique Cazes – EMI Records,  CDC 556939 2

Deja un comentario